Cuando te vengan con CHISMES, pon en práctica la prueba de LOS TRES FILTROS de Sócrates:
En la antigua Grecia, Sócrates tenía una gran reputación de sabiduría. Un día vino alguien a encontrarse con el gran filósofo, y le dijo:
– ¿Sabes lo que acabo de oír sobre tu amigo?
– Un momento, –respondió Sócrates– antes de que me lo cuentes, me gustaría hacerte una prueba, la de los tres filtros.
– ¿Los tres filtros?
– Sí, -continuó Sócrates– antes de contar cualquier cosa sobre los otros, es bueno tomar el tiempo de filtrar lo que se quiere decir. Lo llamo el test de los tres filtros. El primer filtro es la verdad. ¿Has comprobado si lo que me vas a decir es verdad?
– No, sólo lo escuché.
– Muy bien. Así que no sabes si es verdad. Continuamos con el segundo filtro, el de la bondad. Lo que quieres decirme sobre mi amigo, ¿es algo bueno?
– Ah, no! Todo lo contrario.
– Entonces, -cuestionó Sócrates– quieres contarme cosas malas acerca de él y ni siquiera estás seguro de que sean verdaderas. Tal vez aún puedes pasar la prueba del tercer filtro, el de la utilidad.
¿Es útil que yo sepa lo que me vas a decir de este amigo?
– No, en serio.
– Entonces, -concluyó Sócrates– lo que ibas a contarme no es ni cierto, ni bueno, ni útil; ¿por qué querías decírmelo?.
Conclusión :
Deja de sentarte en la mesa en donde hablan mal de otros, por que cuando te levantas…
!Tú serás el tema!
Ahora profundicemos en el tema y las complicaciones sociales que comporta para los implicados:
La lengua no tiene huesos y, sin embargo, es lo bastante fuerte para hacer daño y envenenar a través de chismes y rumores. Un virus letal (y éste lleva toda la vida entre nosotros) pero del que tenemos vacuna, esa que solo se aplaca cuando llega a oídos de la persona honesta.
Y porqué digo honesta? Porque recurriendo al sentido común, sabemos que los honestos (especie humana en vías de extinción) tienen su corazón vacunado que ni atiende ni responde a lo que no tiene sentido.
Pués se puede entender que existan personas (hipócritas) interesadas en crear un chisme (creador intelectual) para que el chismoso (cooperador necesario) lo difunda y el ingenuo (la víctima) lo crea sin resistencia.
Y la mejor muestra la tenemos en Internet dónde se mal usa
y vemos lo rápido que llega a “contagiarse” en el mundo de las redes sociales. Y así de esta
forma, según Gordon Allport (psicólogo) en su libro publicado en 1947, éstas actuaciones sirven a diversos grupos sociales con intereses comunes para cohesionarse entre sí para de esta forma posicionarse ante alguien.
A que te suena? A que has tenido ha alguien en tu círculo de familia, amigos, compañeros, parejas o grupos sociales.
A que hay ejemplos en empresas, estados o políticos que recurren a la mala fé de esta conducta para dar de comer a sus seguidores y de paso reforzarse en sus convicciones (ver la última moción de censura de este pais).
Bueno, queridos lectores que soportan todas las semanas mis paridas mentales, termíno con una pregunta,
Y tú, en que lado de la «ecuación»
te posicionas?:
– Creador intelectual.
– Cooperador necesario.
– Víctima.
Yo, haciendo un ejercicio de honestidad, he estado en las tres hasta que descubrí la Vacuna.
Ahhh, mi colega de batallas, el que traduce mis palabras escritas a imágenes y yo estamos encantado de haber recibido vuestros comentarios anteriores.
Gracias Gente Maravillosa.
JLA/AL20