Abrazado a la tristeza

Malos tiempos para vivir en la calle en Alicante tras la aprobación de la ordenanza para la convivencia ciudadana por parte del equipo de Gobierno municipal. En realidad, nunca lo fueron, pero ahora, a la dura realidad de las personas sin hogar se le una nueva amenaza sancionadora. ¿Para cuándo una ordenanza en clave positiva, y no simplemente punitiva? ¿Alguna de las personas que votó a favor de la ordenanza se detuvo a pensar en la realidad del día a día de las personas sin hogar? Sería interesante contar con la mirada de aquellas personas que más tiempo pasan en la calle. Y con las de las personas profesionales y voluntarias que forman parte de las entidades sociales que acompañan a las personas más vulnerables en nuestra ciudad, cuya situación se agrava con la presente ordenanza.

He salido a la calle abrazado a la tristeza
Vi lo que no mira nadie y me dio vergüenza y pena

Soledad que te pegas a mi alma
En la dulce soledad de este campo de otoño

No hay momentos de sosiego
Rebeldía pura de amores, sin amores (…)

Son versos de un poema de Manuel Chinato, hechos música y canción por Extrechinato y tú allá por el año 2001. Es un canto a la soledad, a las miserias, anhelos y angustia del ser humano. Cada vez que la escucho me vienen rostros, caras de personas con nombres y apellidos, y con ellas sus historias, muchas de ellas de vida rota.

La vida en la calle es dura. Muy dura. Es no disponer de nada. Y depender de todo (otros), para casi todo. Si tienes que orinar… ¿dónde lo haces? ¿Si tienes una necesidad mayor? Si tienes que dormir… la búsqueda diaria de un espacio “digno” (léase con sarcasmo). Con suerte, encuentras un lugar que “apañar” y hacer tuyo… hasta que alguien viene y te violenta, o hasta que alguien viene y te quita la manta, o el cartón, por necesidad o por pura mala baba. Vives en alerta constante, en inseguridad constante. Hay quien piensa, sí, aún hoy, que se está en la calle porque se quiere… o porque uno se lo ha ganado a pulso, con su conducta, con sus decisiones…

Ahora, además, en respuesta a una teórica motivación de fomentar la convivencia ciudadana, legitimamos la acción de invisibilidad de personas sin hogar, personas (travestis y mujeres, mayoritariamente) que ejerzan la prostitución en espacio público y personas que, sin ser sin hogar, ejerzan la mendicidad en un acto de humilde de tragarse el orgullo y “pedir limosna” para poder llevarse algo a la boca o aportar algún sustento en casa. Pues, sí, también esta ordenanza afectará a aquellas personas que, aun disponiendo de un hogar (casa, familia…) se encuentra en situación de desempleo, no tiene ingresos, y su situación le ha llevado a la indigencia, y se les ocurra pedir en la calle o cualquier espacio público.

Son múltiples las situaciones y el perfil de personas que se ven afectados por la actual ordenanza, y pocas las razones aportadas para justificarla.

La web del Ayuntamiento informaba días de la aprobación inicial de una ordenanza para preservar el espacio público como lugar de convivencia, en el que todas las personas puedan desarrollar en libertad sus actividades de encuentro, trabajo, ocio y recreo con pleno respeto a la dignidad y los derechos de los demás, y disfrutar de los bienes y el patrimonio que es de todos. Si es así, me gustaría disponer de un desglose de aquellas actividades que se consideran de encuentro, trabajo, ocio y recreo, y habría sido de agradecer compartir la reflexión con agentes empresariales, hoteleros y hosteleros, por supuesto, pero también con agentes sociales, asociaciones de vecinos, etc, y habríamos expuesto qué elementos echamos de menos entre el mobiliario urbano, y que es necesario añadir a los bienes y patrimonio público, empezando por baños públicos y fuentes o puntos de dispensación de agua potable.

De lo contrario, da la sensación de que es una mera exposición de actitudes, conductas, y actos incívicos, sin entrar en justificación de causa, y un despliegue de sanciones asociadas. ¿Con qué fin? La invisibilidad de aquello que consideramos feo, molesto, y que incomoda a nuestra conciencia, como es ver a alguien durmiendo en la calle, tumbado en un banco, pidiendo en la entrada de cualquier establecimiento público… queremos pasear, comer, tomar un café, refresco, o una cerveza en una terraza, entrar a un acto religioso, o entrar a un cajero, sin que la vista de una persona que huele mal, viste mal, y encima me pide ayuda, me incomode. Que los turistas de Alicante vengan visiten, gasten dinero, se emborrachen y disfruten del sol, la playa y la ciudad (habría que analizar las conductas de muchos turistas que a mí, personalmente, me parecen igualmente, o más, incívicas, que algunas de las descritas en la ordenanza).

Es mejor, más fácil, limpiar de un plumazo a estas personas, haciéndoles imposible la vida en la ciudad, que reflexionar, idear un plan, adoptar medidas, para mejorar la calidad de vida de todas las personas que habitamos esta ciudad.

Y vuelvo a citar a Manuel Chinato

(…)La justicia está arrestada por orden de la avaricia
El dinero que te salva es el mismo que asesina

Y verás sin duda el resurgir poderoso del guerrero
Sin miedo a leyes ni a nostalgias
Y lo verás caer una y mil veces
Y levantarse de nuevo con la pura bandera de su raza
Soledad de amores triste y pura
Soledad de amores y locura

No me des más esperanzas, sé que todo son mentiras
Sacos llenos de agujeros para guardar alegrías

En las dos últimas semanas hemos celebrado fechas significativas que nos han permitido recordar y poner en el foco de la actualidad la realidad de las miles (se hablar de una cantidad aproximada de 30.000 en España) de personas sin hogar, como el Día europeo de los Sin Techo (23 de noviembre) y el Día internacional de las personas sin hogar (último fin de semana de noviembre de cada año), me gustaría poder ofrecer algo más que esperanzas vacuas o alegrías dentro de sacos llenos de agujeros… pero nos lo están poniendo difícil.

Sin embargo, y como no me gusta terminar en sombra, señalo la organización, el pasado 27 de noviembre, de la primera JORNADA DE SENSIBILIZACIÓN, en Alicante para dar a conocer la realidad y situación de las personas sin hogar en Alicante, y el trabajo que las entidades miembros de REAPSHA (red de entidades para la atención de personas sin hogar en Alicante), como un reflejo ilusionante del ánimo y firme deseo de entidades y personas (muchas en nuestra ciudad) en revertir esta situación.

Sergio Méndez Martín del Olmo

Hijas de la Caridad (Obra social Sta. Luisa de Marillac)

Una reflexión conjunta

El 25 de noviembre se conmemora en España el día de las Personas Sin Hogar, fecha señalada no para celebrar si no para tratar de hacer llegar a todos los ámbitos posibles las situaciones que sufren en el estado español una gran cantidad de personas, número creciente según encuestas de INE. Desde el Centro de Acogida e Inserción para Personas sin Hogar de Alicante hemos querido aprovechar esta fecha para desde nuestra posición favorecer la reflexión.

El artículo que desarrollamos parte de una experiencia de reflexión y escritura colectiva. Se ha ofrecido a las personas que disfrutan de una de las plazas del Programa de Inserción la posibilidad de reflexionar de manera conjunta sobre temáticas afines a la exclusión residencial y desde ahí hacer surgir de manera colectiva unas líneas que sirvan de expresión subjetiva. A dicho ofrecimiento acudieron 2 personas con trayectorias dispares y se han desarrollado 4 sesiones para la elaboración de este artículo.

Sin haber entrado a detallar los motivos de la situación personal de cada uno de los integrantes, el consenso del grupo es el sentir el Hogar como una construcción simbólica: “parte de la construcción de uno mismo”, sin la cual un hogar no es posible, hasta construir un “espacio de protección, de seguridad, de cariño, de comprensión, de amor, de educación, donde se incorporan lo límites y los valores y donde uno se siente valorado”. Todo ello entendiendo que se den relaciones de reciprocidad, en el caso de ser el hogar compartido con más personas, o sin ellas, pues el Hogar puede ser habitado por uno mismo, con las mismas condiciones anteriormente expuestas. Hablamos de construcción simbólica para oponer el término Hogar al de vivienda, casa o techo. Estas hacen referencia o son entendidas como estructuras, espacios físicos desde los cuales se puede o no generar un hogar. El hogar podrá ser como hemos comentado de uno mismo, podrá ser construido con amigos o con la familia, tendrá los ingredientes que hemos citado y se desarrollará en un espacio físico determinado, pero no en cualquier espacio. Verbalizan que el CAI “es como un hogar” pero no lo es en los términos tratados porque hay establecida una relación de no-voluntariedad. Hay apoyo y compañerismo, acompañamiento, sienten la cercanía de los profesionales, que entienden su situación y les acompañan en el proceso de recuperación de las cuestiones que se relaciona con la pérdida de la vivienda o de las situaciones vividas tras la pérdida de la misma, pero no llega a ser un Hogar, pues su proyecto vital se encuentra fuera de los límites del centro. Hablamos de relación de no-voluntariedad para destacar que el hecho de acudir a él tiene una relación causal con las situaciones vitales que se dan en el momento presente, no como una meta que se plantea dentro de un proyecto vital y en el que esas relaciones de causalidad no son las deseables.

Se abordó en una de las sesiones la estética del sinhogarismo, esos clichés que muestran ciertos medios de comunicación, y que al ser representados por los medios parecen demostrar la realidad de una situación que califican como indignante. No sienten que esa representación se atenga a la realidad. Si bien algunas personas que sufren una situación de exclusión residencial pueden hacer uso o abuso del consumo de sustancias alteradoras de la conciencia o practicar la mendicidad, sienten que eso no representa la realidad de las personas sin hogar en su totalidad. Este tipo de imágenes oculta a aquellas personas con las que sí se identifican y que sufren la “falta de oportunidades” como el peso que los liga a esta situación.

También se muestran críticos con la aplicación del art.47 de la Constitución española que habla del “derecho de todos los españoles a una vivienda digna y adecuada”, así como de las 3’4 millones de viviendas vacías que hay actualmente en el estado español. Hablan en términos de Necesidad sobre la aplicación de este derecho, pues la ausencia de vivienda es la privación de un derecho fundamental, a nivel legislativo y a nivel de necesidades vitales básicas. También se plantean la adecuación de facilitar el apoyo desde un espacio de mayor intimidad y desde el que comenzar a construir un Hogar. En esta línea de pensamiento se plantean los objetivos en el marco europeo, que tiene como meta acabar con el problema de exclusión residencial que sufren las personas sin hogar antes del 2030.

Al abordar la exclusión residencial en España uno de los participantes nos hace llegar cómo percibía él esta misma problemática en Rio de la Plata, Argentina. Relata que eran regulares las concentraciones de personas solicitando vivienda para todos los vecinos, concentraciones que podían ocupar varias “cuadras” y a las que acudían todo tipo de personas, cuyo nexo era la empatía y solidaridad hacia las personas que habían perdido su residencia habitual. Verbaliza que añora esta manera de apoyarse entre la vecindad reclamando unos derechos que son de todos.

En la última de las sesiones profundizan en la reflexión de diferentes situaciones que plantean y se relacionan con las categorías ETHOS* de Personas sin Hogar formulada por FEANTSA**. Construyen su narrativa a partir de sus experiencias tanto en primera como en tercera persona, tanto en el estado español como fuera de él, y retoman sus argumentos iniciales de la injusta imagen que presenta esta realidad en los medios de comunicación, así como lo beneficioso que sería regular el acceso al mercado de vivienda, para evitar lo trágico de la perdida de vivienda y el hogar, y la dificultad para reconstruir este proyecto vital.

Para finalizar este artículo que publicamos en fecha cercana al 23 de noviembre, comentar que esta experiencia ha sido gratificante y enriquecedora para las personas que han participado de ella y ha ayudado a amplificar el pensamiento sobre una situación que sufren en el estado español un mayor número de personas según las encuestas del INE y de la Comisión Europea.

*Tipología Europea de Personas sin Hogar y Exclusión Residencial.

**Federación Europa de Organizaciones Nacionales para las Personas sin Hogar.

27 noviembre. Día de las personas sin hogar

Ven a conocer el trabajo que se realiza en Alicante acompañando y dando cobertura a estas personas, para mejorar las condiciones en las que viven e intentar ofrecer alternativas.

Te lo mostramos con datos, talleres, exposición fotográfica, información sobre REAPSHA, cuentacuentos, para los más peques.

Además durante todo el día podrás ver de primera mano cómo los equipos de calle intervienen con las personas sin hogar, visitando la ambulancia de emergencia social

Red atención personas sin hogar Alicante